Filtros que imposibilitan la visión: Parte 2 – El Individualismo
[pullquote]Este filtro es uno de los más devastadores para la meta y propósito de Dios. El Nuevo Testamento es muy claro con respecto a lo que Dios desea: Que Su Hijo sea el Centro y Cabeza de todas las cosas.[/pullquote]
“Dándonos a conocer el misterio de su voluntad, según su beneplácito, el cual se había propuesto en sí mismo, de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra. En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad…” Efesios 1:9-11
Además, que Él es quien lleva a cabo su propósito en y a través de su Iglesia:
“A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo, y de aclarar a todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas; para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales, conforme al propósito eterno que hizo en Cristo Jesús nuestro Señor…” Efesios 3:8-11
[pullquote]La individualidad y el individualismo[/pullquote]
Dios nos creó a todos como individuos únicos para mostrar Su increíble diversidad y creatividad. Yo siempre me maravillo al ver como cada persona es única aún y cuando han nacido miles de millones de ellas! Esto es individualidad y es una gran bendición y privilegio para cada uno de nosotros el poder ser diferentes y el poder expresar al Señor de formas únicas.
Pero hay una diferencia entre individualidad e individualismo. El individualismo es el resultado directo de la Caída del Hombre y nos ha cegado para ver el propósito de Dios por causa de una perspectiva personal, centrada en nosotros mismos. Tengo la tendencia a ver todo desde mi propio e individualista punto de vista en lugar de como Dios ve las cosas. Dios no es individualista, de hecho ¡Él no es un individuo! Él es tres Personas (Padre, Hijo, y Espíritu) en uno. Ellos son distintos pero no están separados. Ellos son verdaderamente UNO! Pero la unicidad es un concepto (y definitivamente una experiencia) con la que batallamos bastante, ¿Porque? Porque la Caída nos separó de Dios y de los demás. La Caída nos hizo ver todas las cosas desde un punto de vista individualista (separados). Ahora, aún como Cristianos, vemos todo desde esta perspectiva individualista y centrada en nosotros mismos. Permítame darle algunos ejemplos de esto:
[pullquote]Nuestra Visión del Señor Jesús[/pullquote]
He escrito acerca de esto antes pero permítame simplemente hacer un resumen. Nosotros tendemos a pensar en Cristo como un solo individuo. ¿Alguna vez ha escuchado la historia de “Una Vida Solitaria”? Permítame decirle que ¡Su vida nunca ha sido una vida solitaria! Él vivió en total unicidad y comunión con el Padre y el Espíritu por toda la eternidad. Luego, cuando Él vino a la tierra como hombre, Él vivió y trabajó en total comunión con el Padre y el Espíritu, de hecho Él dijo que eran uno e incluso que vivían el uno en el otro (Vea Juan capítulos 14-17), sin embargo, aun así le vemos y pensamos en Él como un individuo separado ¿No es cierto?
[pullquote]Nuestro punto de vista de las Escrituras[/pullquote]
También vemos las escrituras desde la perspectiva individual ¿Lo sabía?: Pensamos que las escrituras fueron escritas para mí personalmente, como una “carta de amor” ¡del Señor para mí!. ¿Se da cuenta como todo tiene que ver con Jesús y Yo?: Dios Me ama, Él murió por Mí, Él Me salvó, Él Me sanó, Él Me enseña, vemos esto ¡una y otra vez repetidamente! Ahora bien, por supuesto que Dios verdaderamente le ama y tiene cuidado de usted como individuo, pero Él quiere que crezcamos y nos preocupemos por otras cosas –como por ejemplo ¡de Su propósito eterno! Y la realidad es que la Biblia no fue escrita para individuos sino para entidades corporativas.
El Antiguo Testamento fue escrito para una entidad corporativa llamada Israel. El Nuevo Testamento fue escrito para una entidad corporativa llamada la Iglesia. Las cartas (epístolas) fueron prácticamente todas escritas a iglesias locales como la iglesia de Corinto, la iglesia en Colosa, las iglesias en Galacia, etc., sin embargo, siempre tomamos esta escritura y la aplicamos solamente a nosotros personalmente como individuos.
[pullquote]Nuestra Visión de la Iglesia[/pullquote]
Incluso nuestra visión de la Iglesia es individualista. La mayoría de los Cristianos ven a la iglesia como un lugar donde pueden acudir una vez por semana para satisfacer su necesidad personal. La iglesia muy a menudo es vista como un salón de clases donde se recibe educación o como un restaurante ¡para llenar nuestros estómagos espirituales! Pero para Dios la Iglesia es mucho más que todo esto. Ella es Su casa, Su esposa, Su cuerpo, y Su familia. Ella es Su expresión, la manifestación de Su precioso Hijo en la tierra. ¡Ésta Iglesia es el mismísimo cuerpo del Cristo viviente! Y este cuerpo es uno. Este cuerpo existe para ser la expresión o Imagen corporativa de la Cabeza. Sin embargo, seguimos viendo a la iglesia como un vehículo para nuestro propio crecimiento espiritual, nuevamente pensamos que todo se trata de Jesús y yo.
La razón por la que nos es tan difícil el vivir la unicidad y comunión de la vida de Dios es que nuestra mentalidad es también muy individualista. Nuestra cultura es extremadamente individualista y desafortunadamente esta cultura usualmente tiene más lazos sobre nosotros que el Señor mismo. El aspecto corporativo de la Iglesia ha sufrido enormemente por causa de que estamos demasiado ocupados en nuestras propias vidas. Es por esto que Jesús nos llamó a perder nuestras vidas y comenzar a vivir la vida en Cristo. Una vida corporativa y en comunión.
Señor, por favor líbranos del individualismo que ha obstaculizado tu propósito eterno por tanto tiempo. Libéranos del filtro del individualismo para verte a Ti y a Tu Iglesia como realmente es, para que podamos convertirnos en Tu expresión en la tierra. Amén.